Cuando nos matriculamos en una academia de idiomas, a veces no sabemos exactamente cuáles son nuestros derechos. La inmensa mayoría de las veces no surgen conflictos y los estudiantes quedan satisfechos con la enseñanza recibida. Pero si hay algún problema, la ley nos protege con unos derechos que debes conocer.
Contrato de enseñanza
Cuando formalizas la matrícula, la academia está obligada a firmar contigo un contrato de enseñanza. En él se debe especificar la duración del curso, cuántas horas de clase se impartirán y en qué horarios, el precio, la programación y las formas de pago.
Condiciones de pago
Las academias están obligadas a ofrecerte el pago por adelantado o en plazos (mensuales, trimestrales…). A veces se ofrecen descuentos por pagar en plazos más grandes, por ejemplo cada semestre en lugar de cada mes. Si se interrumpen las clases, tienes derecho a recuperar el dinero correspondiente a las clases que no has disfrutado, pero sé prudente: si has pagado todo el curso por adelantado será más difícil recuperar el dinero. Recuerda que tienes derecho a recibir una factura por cada pago que realices.
Las academias pueden ofrecerte pagar al contado, mediante domiciliación bancaria o financiado el curso. Si decides financiar el curso, puedes hacerlo con la entidad que quieras. En ocasiones, las academias tienen acuerdos con bancos que te ofrecen condiciones especiales, y en este caso tienes derecho a un contrato de financiación donde figure el importe, los plazos, las tasas y todas las demás condiciones.
Folletos publicitarios
Si te han dado un folleto publicitario o informativo, guárdalo. Este tiene valor contractual, es decir, que funciona como un contrato implícito. Si el folleto habla de unas condiciones que no se cumplen, tienes derecho a exigirlas.
Derecho de desistimiento
En los catorce días naturales después de firmar el contrato, tienes derecho a anularlo sin coste alguno. Eso sí, en caso de que ya hayas recibido alguna clase, deberás pagar por ella. Y si has recibido materiales, deberás pagarlos o devolverlos en perfecto estado.
¿Y mi título?
Las academias de idiomas se consideran entidades de enseñanza no reglada. Es decir, solo por estudiar en ellas no tienes derecho a un título oficial. Muchas academias sí nos ayudan a preparar exámenes oficiales: el Cambridge, el Trinity, el DELE, etc. Pero debes aprobar esos exámenes para obtener una titulación: no basta con asistir a clase.
Lo que sí puedes pedirle a tu academia es un certificado de asistencia en el que consten el nivel del curso y el número de horas.
Reclamaciones
En caso de conflicto, tienes derecho a presentar una queja en la hoja de reclamaciones. Esta debe ser un modelo oficial, y debes quedarte una copia para ti. También puedes recurrir a un arbitraje en la oficina de consumo más cercana.
Fiabilidad
En todo caso, lo más inteligente para evitar problemas es matricularse en una academia fiable. Y para eso, nada mejor que conocer la experiencia de otros usuarios.